dimarts, 6 d’octubre del 2009

Envidia

Pego la noticia que he encontrado en Divertinajes. Los franceses serán como serán, pero inventaron el rugby Champagne y luchan por lo suyo. Aquí ya no peleamos ni por lo nuestro, miento, los futboleros combaten cada día por nada, que si los árbitros, que si ese se tiró, que buenos son los míos..., atrapados en el tiempo de la historia circular.

A finales de agosto, 406 librerías francesas obtuvieron, del Centre National du Livre y del Ministerio de Cultura, la condición de LIR: Librairies Indépendantes de Référence. Para hacerse merecedoras de ese sello de calidad, las elegidas tuvieron que demostrar que su oferta libresca era rica y variada, y que la suya era mucho más que una simple actividad comercial: una labor de animación cultural.

Ahora, el Ayuntamiento de París ha decidido exonerar del impuesto profesional a las 57 librerías parisinas LIR, porque –aseguran desde el consistorio–, las librerías independientes desempeñan un papel fundamental en la vida cultural parisina y son el eslabón débil de la cadena del libro.

Esta medida supondrá que las arcas municipales dejarán de recibir unos 200.000 € en 2010.

Y, quizá, salvará de la quiebra a algunas de esas librerías donde todos hemos rozado con la punta de los dedos l’écume des pages.

1 comentari:

Phil ha dit...

Bravo por los parisinos. Envie, envy, enveja, Neid... no sé decirlo en más idiomas. Que estábamos llegando y nos rezagamos de nuevo. Ya sabes a qué me refiero.