divendres, 28 de gener del 2011

United of Manchester, los últimos románticos.

Viendo un reportaje de "Informe Robinson", que me aconsejó mi amigo Dani, descubrí la historia de este club inglés.  Un grupo de aficionados al Manchester United creó su propio club cuando vio que su equipo de toda la vida era vendido a unos multimillonarios norteamericanos.  Este es el prinicipio de una historia que merece tener un hermoso final.  Os dejo el artículo de Salvador Tejero que encontré en el mar de internet.

United of Manchester: sinónimo de rebeldía
Salvador Tejedor

Desde hace ya muchos años, y muy a mi pesar (y supongo que ustedes pensarán igual), el fútbol se ha convertido en un negocio que mueve ingentes cantidades de dinero en todo el mundo, convirtiéndolo en un circo mediático en el que priman valores como los de enriquecerse sin importar las consecuencias, traficar a diestro y siniestro con la ilusión de miles de aficionados, y en definitiva, todos aquellos valores que se acercan más a los de una empresa que a los de un club de fútbol (porque no se equivoquen, un club NO es una empresa). Con todo esto, lo que ha ocurrido es que un deporte noble en el que imperaba la modestia, el coraje, la lucha, la entrega, el compañerismo y la amistad, ha pasado a ser una detestable multinacional a gran escala, donde como ya digo, únicamente importa llenarse los bolsillos.

Pues bien, desde hace relativamente poco, concretamente desde el año 2005, un grupo numeroso (2.700 aprox.) de aficionados disidentes del Manchester United, contrarios a la ideología imperialista del fútbol moderno, crearon un club amateur como protesta a todas estas ideas anteriormente citadas, y más precisamente contra la venta del club a los magnates norteamericanos Glazer. Su nombre, F.C. United of Manchester. Dichos aficionados creen que un club de fútbol debe existir para el beneficio de los propios hinchas, y no para que ciertas personas especulen con sus éxitos deportivos. Se les conoce por el cariñoso apodo de “Red rebels”, o rebeldes rojos, en contraposición a los “Red devils” (diablos rojos) del ManU.

Los “sagrados mandamientos” (o por lo menos los más importantes) del FCUM, se encuentran en español en esta página.  A modo de resumen, se pueden destacar los siguientes:

1.- El FCUM es democrático, propiedad de los aficionados y sin fines de lucro, por lo que entre otras cosas, se niegan rotundamente a llevar publicidad en sus camisetas.
2.- Es accesible y asequible para todo aquel que quiera formar parte del mismo.
3.- Tanto es así, que el abono anual cuesta la insignificante cantidad de 12£, con la posibilidad de donar una cantidad superior en beneficio del club, y por tanto, de los aficionados.
4.- Al ser democrático, TODOS los aficionados tienen el mismo derecho a votar y decidir sobre la mayoría de aspectos relacionados con el club.
5.- Actualmente juegan sus partidos como local en Gigg Lane, a 9 millas de Manchester, y hasta la fecha, han conseguido recaudar la nada despreciable cifra de 200.000£ para construir un estadio propio. Están en proceso de convencer a los vecinos e instituciones financieras para costear un nuevo estadio de 4 millones en Newton Heath, donde se originó el Manchester United.

Hay que resaltar, que 300 de estos románticos defensores del fútbol con mayúsculas, trabajan voluntaria y desinteresadamente para el club, haciendo que su labor sea cuanto menos, de proporciones épicas, elevando así al United of Manchester a la categoría de gigante, aunque jueguen en la Northern Premier League (la séptima división inglesa).

Toda esta historia quedaría huérfana de pasión y verdadero sentimentalismo, si no fuera porque el pasado 5 de noviembre, derrotaron al Rochdale de la League One (sería como nuestra 2ªB española) en la primera ronda de la antiquísima FA Cup por 2-3, en el campo de Spotdale. Un hito sin precedentes en los 130 años de historia de la competición más antigua del mundo del fútbol.

Los aficionados del FCUM, invadieron el estadio del Rochdale para animar a su equipo, copando la mayoría de los asientos ante el asombro de propios y extraños. Así, pudieron observar incrédulos, pero emocionados, cómo su United of Manchester comenzaba de forma aplastante endosándole un 0-2 a todo un equipo de la tercera división inglesa, teóricamente superior a su rival en todos los aspectos. El equipo local, enfurecido ante tal humillación, reaccionó y consiguió remontar el resultado marcando dos goles consecutivos, dándole un merecidísimo y emocionante final al partido. Pero, de repente, como si de un cuento o una película se tratase, sucedió algo inesperado que convirtió en mágico y grandioso lo que, si no, sólo hubiese sido estupendo: los Red Rebels anotaron el tanto de la victoria en el minuto 94 del encuentro, tirando por tierra toda opción de que hubiera un partido de replay (el desempate en la FA Cup) y clasificándose así para la siguiente ronda de esta apasionante competición.

Los rebeldes de Manchester ya están en la segunda ronda de la FA Cup, y si la superan, podría darse el choque con más morbo desde hace mucho tiempo: Manchester United – United of Manchester. ¿A quién animarían los aficionados de Old Trafford? ¿Se atreverían a animar al equipo de barrio al son de “Glazers, no me podéis comprar”?

Si se me permite la licencia de opinar ante todo este revuelo (faltaría más. Es mi blog…), diré que en mi humilde opinión, un club tendría que ser la mezcla de ambas posturas. Me explico. No se puede hipotecar el futuro de un club emblemático, para que unos pocos “saquen tajada” y llenen sus arcas con millones y millones. Pero tampoco es positivo para la salud del mismo, que sus aficionados única y exclusivamente velen por su propio interés. Me parece del todo egoísta. Entiendo que el escudo va por encima de los intereses de cualquier persona. Ha de ser una comunión entre dinero y solidaridad, entre capitalismo y cooperativismo, entre cerebro y corazón.

Mi más sincera enhorabuena para todos estos héroes del fútbol. Ojalá lleguen lejos.